Notario

Un Notario Público es un representante confiable del estado que realiza una serie de actos oficiales para disuadir el fraude vinculados a la firma de documentos importantes para el público en general como testigo imparcial. El término «certificados notariales» o «actos notariales» se refiere a estos negocios jurídicos. Los notarios son designados por el público como funcionarios «ministeriales», lo que significa que no se les permite usar mucha discreción personal, como sería el caso de los funcionarios «judiciales», y en cambio están obligados a seguir reglas escritas.

¿Qué hace un Notario?

La responsabilidad de un notario es verificar la identidad de los firmantes de documentos cruciales, garantizar que estén libres de coerción o intimidación y que estén informados de los términos de la transacción antes de que acepten firmar. En algunas notarizaciones, el Notario también debe prestar juramento, bajo pena de perjurio, declarando que la información en el documento es genuina y correcta. Los poderes notariales, los testamentos y las escrituras de propiedad son algunos ejemplos de documentos que con frecuencia necesitan un notario.

La base de la fe del público en los notarios es la imparcialidad. Tienen el deber de abstenerse de actuar en circunstancias en las que tengan un interés personal. El público en general tiene fe en que las responsabilidades de selección del Notario están libres de prejuicios. Un Notario siempre debe ser imparcial, lo que prohíbe rechazar a un cliente debido a su raza, nacionalidad, religión, política, orientación sexual o condición de no cliente.